Algo que echo de menos del confinamiento es el respeto al silencio y el descanso de todxs que se vivió.
Deberían promulgarse horarios de uso de espacios públicos como las plazas cuyo ruido afecta a todo el vecindario. Y que existan multas y trabajos sociales por no respetarlos.
Ídem para las colillas en el suelo o en la arena de la playa, y otro tipo de basuras fuera de los lugares destinados a ellas.
También la construcción de "berolos" debería estar perseguida.
Si a alguien se le ocurre algún detalle más que lo aporte en comentarios. Lo menos es que las normas de convivencia velen por todxs. Lo que puede ser participativo son las propuestas pero el objetivo ha de ser común.
Y no entiendo por qué no usar cámaras de vigilancia siempre que su uso esté regulado. Si con educación no basta ni con sanciones pues quien se exceda debe ser identificado/a.
Me parece primordial controlar el ruido y la música de las terrazas del municipio, hay un exceso descontrolado de mesas y sillas. Muchos empresarios ponen música en el exterior lo que hace que sus clientes tengan que elevar la voz para hablar y esto perjudica la calidad de vida de los ciudadanos y vulnera su derecho al descanso y una vida digna
Y las propias fiestas organizadas por el gobierno municipal, por ejemplo. Que ya se ven detalles pero tienen que reforzarlo.
Cuando terminen cerrando todos los bares y discotecas, bueno los pocos que quedan, se quejarán. Porque les recuerdo que en el pasado el puerto era de destacar por su vida nocturna, ahora date una vuelta después de las 10, se podría decir que está muerto ya no hay vida gracias a gente como ustedes que se quejan del ruido cuando ha sido algo normal desde siempre, lo que pasa que se ha llenado de personas mayores del extranjero que se vienen a descansar aquí al Puerto de la Cruz y compran a lo mejor encima de una discoteca que ya estaba, en vez de irse a otro municipio